Esas patitas encantadoras. Esa nariz para achuchar. Esos ojos en los que uno se derrite. ¡Quiero más de eso!
Casi todo dueño de perro se hará la pregunta al menos una vez en su vida: ¿Debería conseguirme un segundo perro? Los motivos para este deseo pueden ser muy diferentes. El profundo afecto por los perros y las buenas experiencias con el primer compañero de cuatro patas suelen ser la fuente principal de pensamientos sobre el segundo perro. Sin embargo, la decisión es difícil para la mayoría de los dueños de perros: hay mucho que considerar. ¿Qué pasa si no estoy a la altura del desafío? ¿Y si mi perro no está a la altura del desafío?
Ser consciente de asumir otra gran responsabilidad es el primer y más importante paso hacia el segundo perro. En William Walker queremos ayudarte con esta decisión. Por eso hemos creado la lista del segundo perro. Aquí se resumen diversos factores a considerar, se explican y se enriquecen con posibles soluciones.
5 cosas en las que deberías pensar si estás considerando conseguir un segundo perro:
1. ¿Es suficiente el espacio en mi apartamento/casa para que un segundo perro...?
- tenga un lugar para dormir lo suficientemente grande? Los perros necesitan su propio rincón acogedor para acurrucarse y estirarse, para ser compañeros descansados y equilibrados, ya que la rivalidad y la envidia pueden generar estrés y tensión entre los congéneres.
- tenga un lugar para comer con suficiente espacio? La defensa de la comida es un instinto ancestral en cada ser cuadrúpedo, aunque su manifestación puede variar de manera individual. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, solo porque un perro no manifieste un instinto no significa que no esté presente. Comer en estado de alerta puede llevar a tragar la comida demasiado rápido, lo que no solo genera estrés, sino que también es perjudicial para la salud del perro. Puertas, esquinas, rincones o muebles se pueden utilizar para crear una sensación adicional de distancia y privacidad.
- tenga suficiente libertad de movimiento? Cada dueño de perro experimenta días en los que los paseos diarios con el perro son insuficientes. Y está bien. Los perros también pueden pasar un día en el sofá, siempre que no sea la norma. Después de todo, la mayoría de los cuadrúpedos prefieren quedarse calientes y secos en caso de mal tiempo. Para esas situaciones, hay una variedad de actividades en interiores para los peludos. Ambos perros deben tener suficiente espacio para moverse libremente sin pisarse.
- tenga un lugar para retirarse? Es importante que los perros tengan la posibilidad de evitar a los demás. Para una socialización adecuada, es necesario que los animales conozcan y evalúen las reacciones de sus compañeros. Especialmente los perros jóvenes no siempre pueden interpretar correctamente los límites de sus compañeros de juego o pueden volverse atrevidos y juguetones. Para evitar conflictos, los perros deben tener la oportunidad de encontrar protección y tranquilidad a través de la separación espacial.
2. ¿Mi entorno es adecuado para un segundo perro?
- Debe aclararse si el arrendador/propietario de tu apartamento/casa permite la tenencia de un segundo perro. Muchos inquilinos hoy en día ni siquiera le preguntan al arrendador sobre el permiso, lo que conlleva un gran riesgo. UN perro posiblemente se pueda ocultar, pero con dos perros esto es mucho más difícil. No a todos les gustan los perros y comprenden los ruidos o las huellas de las patas en el pasillo. En el peor de los casos, esto puede llevar a un despido y a una demanda de desalojo. Pero no te preocupes, también hay muchos amantes de los perros entre los arrendadores. Si las experiencias con el primer perro fueron positivas para todas las partes, entonces el camino hacia la felicidad del segundo perro está despejado.
- ¿Cómo son las condiciones para pasear en tu entorno? Tener dos perros en la misma casa no significa que sus necesidades de orinar y defecar estén sincronizadas. Sobre todo si has elegido un cachorro como segundo perro, el período hasta que esté educado puede ser una tortura si vives en el quinto piso a una cierta distancia del próximo espacio verde. Un pequeño espacio verde, un jardín o un entorno verde pueden resolver este problema por completo. La ausencia de un jardín no debería ser un factor excluyente; donde hay voluntad, hay camino.
3. ¿Soy apto para un segundo perro?
- Un segundo perro requiere tiempo. Especialmente al principio, durante la fase de adaptación y socialización, el nuevo miembro de la familia de cuatro patas necesita mucha atención. Un cachorro incluso implica un trabajo adicional a tiempo completo. Mientras que la falta de un jardín se puede compensar con más esfuerzo, no hay sustituto para el tiempo. Mucho tiempo y el deseo de pasar ese tiempo con los perros son requisitos básicos para cuidar a dos o más cuadrúpedos.
- La educación canina es fundamental para una buena convivencia. El humano está más comprometido en esto que el propio perro. Con dos perros, las distracciones aumentan y los perros se animan mutuamente. Mantener el obediencia de dos perros no solo requiere paciencia y mucho trabajo, sino también determinación. Si tu perro te lleva de las narices, también lo hará un segundo perro.
- Los costos de cuidar a un perro se duplican con un segundo perro. No solo se necesita el doble de comida, sino que también aumentan los gastos veterinarios. Un segundo perro también está sujeto al impuesto sobre perros y se debe contratar otro seguro de responsabilidad civil para perros. Siempre se debe tener en cuenta el riesgo de que no todos los perros tengan el mismo estado de salud. También se debe poder permitir financieramente los casos de emergencia. También hay seguros de salud para perros disponibles.
4. ¿Mi perro está listo para otro perro?
- Tu perro debe dominar los comandos básicos. Si tu peludo aún carece de obediencia, debes invertir tiempo adicional en su educación antes de que otro perro
