¿Cómo te está yendo hasta ahora con tus propósitos de Año Nuevo? Comenzar el nuevo año con buenos propósitos le brinda a muchas personas una sensación de renovación, aporta un poco de estructura a lo desconocido y resulta motivador. Además de una alimentación saludable, la membresía en el gimnasio finalmente y el propósito de dedicarse más tiempo para uno mismo, un estilo de vida sostenible también está en la agenda de Año Nuevo de muchas personas.
Mientras que la sostenibilidad y la moderación ya son una parte fundamental en la vida de muchas personas, a otras les resulta difícil cambiar sus hábitos debido a costumbres arraigadas y aún no pueden hacer que su rutina diaria sea más amigable con el clima. Un vistazo crítico a la rutina diaria o a los productos estándar habituales para el hogar suele revelar las primeras debilidades. En la mayoría de los casos, hay alternativas geniales y respetuosas con el medio ambiente disponibles hoy en día, y no solo para la vida humana, sino también para la vida canina. Cuidar y atender a nuestro ser querido de cuatro patas también consume los recursos finitos de nuestro planeta y genera desechos y suciedad. Hoy queremos compartir los mejores consejos y trucos sobre cómo hacer que la vida con tu perro sea más respetuosa con el medio ambiente y cómo convertir tus buenos propósitos en acciones concretas.
1. Alternativas sostenibles modernas en lugar de lo tradicional: bolsas compostables para recoger los desechos y más
Si vives en la ciudad con tu perro y este tiene una digestión normal, es de esperar que consumas al menos dos bolsas para recoger los desechos al día, lo que equivale a 730 bolsas al año. Estas bolsas suelen ser de plástico y, debido a su contenido, ya no son reciclables en el contenedor amarillo. Con la recolección de basura, las bolsas de plástico terminan en el mejor de los casos en la planta de incineración de residuos, y en el peor de los casos, en los arbustos, donde no se descomponen, sino que se descomponen lentamente en microplásticos. Esto no solo contamina el aire que respiramos, sino también los pulmones de nuestra Tierra y las aguas del planeta. Desde hace varios años, existe una solución muy sencilla para esto: bolsas para recoger desechos amigables con el medio ambiente fabricadas con materiales biodegradables e incluso compostables como el cartón o el almidón de maíz. Nuestras bolsas para recoger desechos "Poop It" de William Walker no contienen fragancias, son biodegradables y, por cierto, también son robustas y resistentes.
2. Compras sostenibles: menos residuos de envases
Al igual que nosotros en William Walker, muchos otros fabricantes de moda y accesorios para perros se han comprometido con los estándares de sostenibilidad. Para el perro y también para el medio ambiente, los juguetes, cepillos, peines, correas y otros accesorios fabricados con materiales naturales son mucho mejores que los productos químicos de plástico. Por lo tanto, siempre vale la pena echar un vistazo a los ingredientes o materiales de fabricación de productos individuales, así como a la filosofía de la empresa. Para algunos, la eliminación de envases innecesarios es tan importante como la calidad de sus productos.
3. Alimentación canina amigable con el clima: comida para perros a base de insectos y más
La alimentación canina siempre ha sido un tema controvertido. Uno considera que la alimentación natural cruda (BARF) es la única forma correcta de alimentar a los perros, mientras que otro jura por la comida seca de dieta especial de su marca favorita. La realidad es que nuestros perros ya no son lobos. Nosotros, los humanos, tampoco tenemos la intención de alimentarnos como los monos. A lo largo de milenios de crianza de perros, nuestros amigos de cuatro patas, tal como los conocemos hoy, se han adaptado cada vez más a vivir con los humanos. Un perro ya no va al bosque a cazar presas, depende de su dueño y de su elección de comida. Dado que la producción de carne es uno de los principales contaminantes ambientales, es bueno que nuestros perros dependan de mucha menos carne de lo que solían necesitar sus antepasados. Por lo tanto, el contenido de carne en la comida para perros sostenible suele ser menor, pero de mayor calidad, a menudo incluso de calidad biológica.